NIEBLA INTERIOR

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Todos buscamos de una u otra manera que se disipe

jueves, 12 de julio de 2012

Góspel, aprendices de semidioses




La primera noche de verano, un concierto de Góspel, y un verso de Gabriel y Galán

Que noches, que noches
que horas, que auras
para hacerse de acero los cuerpos
para hacerse de oro las almas.
Es una música que va in crescendo y te va poseyendo sigilosamente. Como los vestidos ad lib de sus cantantes femeninas. Tenues, vaporosos,  sugerentes, como si solamente se sostuvieran por las voces de sus juglares. Sugestivos cuerpos femeninos con voces de diamante. Y el ritmo. Te rindes a su cadencia hasta que finalmente quedas prisionero de su poder hasta perder el aliento. Hermosa cárcel de la que nunca quisieras salir.
A veces el deseo es superior a la imaginación o la imaginación superior al deseo. Los cuerpos femeninos cubiertos por un velo insinuante,  son más incandescentes que la propia imagen del cuerpo. Música y mujer armónica.  Quien es quien.  Como perderse entre ellas. Como fundirse en una hoguera que te abrase entre ambas.
Quizás sea esta intempestiva hora de la madrugada que me hace experimentar estas demencias. El pensamiento de la mujer imaginada y deseada es perverso .Sentimientos recientes que pueden perdurar en subsiguientes y esperadas noches  veraniegas.
El góspel habla de la relación del hombre con Dios. Y lo puedes expresar allí mismo. Nos convertimos en aprendices de semidioses, en dioses menores. Es una relación de tu a tu. Nada de místicos intermediarios. Incluso no hace falta que haya un dios. Uno mismo es aprendiz de él, es el su propio dios. Para amar, para imaginar, para sentir.
La próxima será en una noche de agosto. En el Monestir de Santes Creus al lado del rio Gaià. Mas que un rio un hilo de agua, pero que tiene el inmenso poderío de no secarse nunca. Como las gentes de su ribera. Mis gentes y mi ribera.
Quizás al salir, en la noche cerrada, debiera perderme en la oscuridad de sus aguas. Ya lo pensaré. Estoy seguro que si lo hago, encontrare una pléyade  de cantantes aprendices de semidiosas que me llevaran con ellas y cantaremos y cantaremos hasta que se silencien  nuestras voces y solo nos comuniquemos con las almas. De oro claro está, Gabriel nunca me lo perdonaría.






2 comentarios:

esperanza dijo...

¡Qué emotivo Manuel, cuánta belleza...! "Éxtasis" Y ninguna otra manera de llegar a él que no sea el encuentro de Almas, de oro, claro está. Felicidades por tus sentimientos y tu manera de expresarlos. Abrazos estivales con añoranza. Gracias por estar.

esperanza dijo...

Vuelvo de las vacaciones y entro en tu página a ver si... escribes y compartes. Vengo a leerte, Siempre¡¡¡