NIEBLA INTERIOR

NIEBLA INTERIOR
Todos buscamos de una u otra manera que se disipe

domingo, 15 de abril de 2012

Maria de Ramón

También se podría titular "Cariño en estado puro" , "Amor sin condiciones" o "Transformación del sufrimiento en sentimiento", por no nombrar mas que estos.

Mi amigo Ramón, el marido de María. Quien era mas amigo mío, el o ella? De hecho yo conocí primero a ella , pero fué con el con quien se casó. Les puse música de Los Beatles en su boda, porqué aunque él tuviera los discos en su casa, yo se los había prestado casi a perpetuidad.

Luego continuó la vida real con todos sus componentes. Hijos , bautizos, comuniones, bodas y finalmente la tragedia, como parte del componente vital de la existencia.

En un concurso de "castells" en el "quatre de nou amb folre", cae "l'enxaneta" sobre la espalda de Ramón y le parte la tercera vértebra. Una probabilidad entre millones. Así de sencillo, así de trágico.

Pentapléjico. Lo que es lo mismo que decir tetrapléjico con respiración asistida. Ramón se convirtió en la prolongación de una máquina, una humana y querida máquina rodeada de las mas maravillosas personas que jamás haya conocido o imaginado.

Como se puede transfigurar un entorno tétrico y oscuro en uno de radiante y luminoso? Creo que fué con la varita mágica que tenia escondida María. Yo siempre lo intuí y al final lo descubrí. Es amar desde el interior, desde las profundidades del propio ser, desde donde se generan los sentimientos incandescentes e indestructibles, que fluyen como lava fundida y lo arrasan todo.

Tres años internado en la clínica Guttmann de Barcelona y ella sin dejarlo de ver ni un solo día.

Me acuerdo de su tesón en hacerle chatear con la nariz. Un señuelo metálico en la nariz, un sensor tipo Web Cam delante del ordenador y a chatearrrrrrr!!!. Yo me vi involucrado en tan diabólicas prácticas, pero cualquiera contradecía a doña María. También tenía un programa logopédico de voz que escribía una página de Word simplemente hablando. Aquí Ramón me liaba. En lugar de a Tarragona me mandaba a Tarazona o incluso más lejos. Pués de eso se trataba, de divertirse en lugar de entristecerse. Lo dicho, la mandamás estaba allí al acecho de lágrimitas furtivas. Nada de pañuelos, nada de Klenex.

Un día fuí a su casa a visitarlo y me dijeron que estaba en el hospital. Por la tarde fuí al hospital y me dijeron que ya estaba en su domicilio de nuevo. Al llegar a su casa y hacer este comentario, va María y me espeta delante suyo: vaya Manuel que lento eres, incluso sin poder andar no puedes atraparlo. Era así de maravillosa María. Toda la tarde riéndonos a costa de Ramón. Luego tuvo que limpiarle la tráquea de fluidos de tanto reir.

A veces lo ingresaban para controles rutinarios y María podía descansar un poco. Aprovechó uno de estos ingresos para asistir a una reunión de ex alumnas y resarcirse un poco de la situación.Les dijo: vengo porqué Ramón está ingresado. Las que no estaban al caso quedaron aterradas. Irse a cenar aprovechando que el marido estaba ingresado, que barbaridad. Era al revés de lo habitual. Cuando el estaba ingresado ella podia descansar. Así era su vida.

Y las comidas que hacíamos. La "escudella barrejada" de María no tenía comparación. Yo llevaba las aceitunas cultivadas y aliñadas personalmente con una receta secreta...y mas cosas.
Yo salía animado de su casa y porqué no decirlo, algo envidioso.

Pero eso sí, ella ni la mas mínima queja ni el mas mínimo desfallecimiento.Y el sentimiento de cariño y abnegación que irradiaba. Uno se sentía ínfimo.

María los puso firmes a todos y les dijo: Ramón esta en esta situación. Asumimos el tenerlo en casa como uno mas o no? Todos asintieron y de repente el entorno se iluminó y brilló durante diez luminosos años.
Ramón fué como uno mas, sin ningún privilegio pero con todos los cuidados habidos y por haber.

Hijas, hermano, cuñados,padres, suegros, yerno, tios, amigos y compañeros crearon un halo de normalidad en torno a él que era una maravilla. A veces creía que el "anormal" era yo porqué me preocupaba por cosas debidas a su situación.

Sería inacabable narrar todas las anécdotas y situaciones acaecidas. Casi todas fantásticas, tiernas, emotivas. Acariciar y sentir el verdadero amor de cerca no puede definirse.

Me llama María a las 10,45 de la noche desde la Guttmann y me dice que Ramón nos había dejado.Le dije que ya podía romper el testamento vital que yo le había firmado y que debía velar personalmente que se cumpliese en caso de necesidad.

P.D.
Ramón, piensa que aunque tu te hayas ido, se ha quedado con nosotros tu ángel de la guarda.

1 comentario:

esperanza dijo...

Lo siento mucho amigo, pero qué dicha haber sentido ese mismo Amor en tu interior por él, el Amor puro. Tienes mucha suerte de que su Angel de la Guarda te guarde también desde su corazón.
Un abrazo.